
Los países desarrollados llevan décadas preocupados por la sostenibilidad de los sistemas sanitarios. El gasto en salud crece a medida que los países se desarrollan y se preocupan por mejorar su bienestar, pero diversos factores contribuyen decisivamente en este crecimiento continuo del gasto sanitario:
1. Crecimiento, evolución y difusión acelerada de la tecnología sanitaria.
La tecnología sanitaria, técnicas diagnósticas y terapéuticas y nuevos procedimientos han contribuido de un modo determinante a la mejora de la salud de la población.
2. Incremento de la demanda y la utilización de servicios.
Esto se debe a tres factores:
o El envejecimiento de la población, un factor muy importante de incremento del gasto en los países desarrollados: aumenta la probabilidad de desarrollar una enfermedad crónica y conlleva
mayores costes de cuidado de la salud.
o El incremento de enfermedades crónicas y degenerativas. Los cuidados de salud han mejorado, lo que supone que más personas se convierten en enfermos crónicos y dependientes de los servicios de salud. Esto se suma a algunas enfermedades propias del desarrollo como la obesidad, el sedentarismo o el tabaquismo.
o Las mayores expectativas de la población, por la mejora relativa del concepto de calidad de vida y una menor tolerancia a la enfermedad.
3. Otros como el incremento del gasto farmacéutico, la ineficacia de los modelos administrativos, etc. En este entorno complejo, el hospital tiene que dar respuesta de forma eficaz y eficiente a las necesidades de salud de los ciudadanos. Los gestores de hospitales deben gestionar una organización muy compleja en este entorno de inestabilidad financiera, de recursos limitados y reducidos y de expectativas sociales elevadas.
¿Qué hacer y cómo será el hospital en el futuro?
-El hospital tendrá que encontrar entre los profesionales a sus principales aliados, y los gestores deberán ser líderes que dirigen líderes, para lograr equipos organizados, orientados a procesos y con modelos de atención integrada. Estos equipos multidisciplinares romperían las actuales estructuras estanco de unidades y servicios, no orientadas a los procesos.
-Se deberá trabajar la figura de gestores de casos, que conecten al paciente con el resto del equipo. Además de seguir desarrollando los procesos ambulatorios, haciendo del hospital un lugar de cuidados.
-Se crearán hospitales informatizados, digitalizados, que se apoyen en las nuevas tecnologías como el big data para la toma de decisiones clínicas.
-Será necesario gestionar la cronicidad, desplazar los servicios poco complejos a otros niveles de atención (primaria, hospitales comarcales, clinicas, etc). Potenciar el papel de los enfermeros para la educación para la salud en el autocuidado y la prevención. Favorecer los desplazamientos para acercar la asistencia a los pacientes y favorecer su acceso en centro de menor complejidad. Apoyarse en las asociaciones de pacientes.
-Cobra importancia la prestación de servicios de excelencia según la percepción de pacientes y familiares. Gestionar de forma continua y directa la calidad de los procesos y servicios.
-Por último, es necesario que haya gestores hospitalarios eficaces, implicados, que tengan visión y que sepan liderar en tiempos complejos y conseguir la implicación de los profesionales, sin los cuales esto no es posible. El papel fundamental de la autoridad sanitaria es sensibilizar e implicar a los ciudadanos para que hagan un uso adecuado de los recursos de salud y se
involucren en las medidas de prevención y autocuidado de su salud.